Google había anunciado hace un par de días la llegada del Sistema de Alertas de Terremotos y el Servicio de Ubicación para Emergencias (ELS) para los dispositivos Android en la Argentina. De esta forma, la compañía brinda nuevas herramientas para ayudar a las personas en momentos de crisis, acercando información temprana sobre terremotos y un servicio que envía a los centros de emergencia información sobre la ubicación de los usuarios, para encontrar más rápido a quienes necesitan asistencia.
Dentro del espectro de comunicaciones que ofrecen los teléfonos Android, hay dos nuevas herramientas gratuitas que, en caso de una contingencia doméstica o un siniestro, pueden salvarle la vida a su portador y anoche demostraron que funcionan a la perfección.
Los ELS, que ya operan en muchos países, permiten a los servicios de emergencia conocer con una mayor precisión la ubicación de la persona que realizó la llamada al 911, sin necesidad de que la víctima se lo informe.
La mayoría de móviles puede realizar llamadas de auxilio siempre que haya una torre telefónica dentro del alcance del móvil. Ahora, para aumentar la precisión del rastreo, los equipos Android recurren a una combinación de datos, GPS, móviles, Wi‑Fi y sensores.
“A través del ELS se reduce el radio de búsqueda de 14 kilómetros a 6 metros, lo que la vuelve hasta 3.000 veces más precisa que la triangulación mediante torres de telefonía móvil», explica Camila Domínguez, gerente de alianzas de Android para América Latina.
Esta posibilidad que se encuentra en la mayoría de los teléfonos Android, sin importar el modelo o el año de fabricación, puede salvar la vida a 3 mil millones de personas en el planeta y a 30 millones argentinos que estén en peligro. La señal se activa solo en caso de que el usuario realice una llamada o envíe un mensaje al 911.
“En el mundo, más del 80% de las llamadas de emergencia provienen de dispositivos móviles. Sin embargo, localizar a las personas que necesitan ayuda puede resultar difícil si sólo se utilizan herramientas de triangulación, como las torres de telefonía móvil y los GPS”, explica Domínguez.
El envío de la localización se realiza mediante SMS o por HTTPS. Para ello se utiliza el protocolo AML (Localización Móvil Avanzada), un protocolo de comunicación que no requiere la intervención del usuario.
Estos datos se comparten sólo con emergencias y únicamente los operadores pueden descubrir la ubicación de la llamada. Dichos servicios de ubicación no guardan relación alguna con el registro de actividad de Google.